Secuestro, rapto... no se como llamarlo [...]

Si, lo se, soy consciente de que mi vida apesta...

Intento, juro por Dios que lo intento.

No estoy hablando de mi peso, ni de mis kilos, ni de mi grasa, ni de los hombres, ni de los problemas sociales, ni de mis ideales... Estoy empezando a asimilar que algunas de esas cosas no las puedo cambiar, otras si. Intento de veras que esta enfermedad no acabe de conquistar toda mi mente, lucho por llevar esta vida de forma sana. No hablo de salud física, no hablo de mis problemas de anemia, ni de mi falta de hierro... La verdad, no quiero luchar contra este enfermedad, me siento bien con ella... Creo que por ahora el control físico lo tengo yo, he de admitir que siempre, incluso antes de caer en esto, tuve falta de hierro y por consecuencia, anemias... pero mi mente, mi corazón... eso es otro tema.

Intento que mi mente, que mi corazón me sigan perteneciendo a mi...

Quiero que Ana me devuelva mi salud mental, quiero que me devuelva a la niña feliz... la niña que sonreía, la que gritaba y dibuja durante horas sin perder la sonrisa...

Peleas, gritos, golpes, insultos, lágrimas, jadeos, llantos, odio...

Risas, ánimos, caricias, besos, abrazos, sonrisas, bromas, alegría... Puede que si llego a mi meta, si cumplo mi parte del trato, esa niña vuelva a aparecer, no lo se. Besos. PD: Admitamoslo, me estoy volviendo loca. PD2: Fingiré que nunca escribí este post, fingiré que soy feliz, fingiré que mi vida es perfecta. Fingiré ante el mundo que soy perfecta. Que ironía!